Esta raza Duroc o Duroc-Jersey no es una raza nueva. Se trata de una raza que surge por fusión de la Old Duroc y la Red Jersey en el siglo XIX, en EEUU. En estas dos razas fundadoras, a su vez, tienen participación cerdos de muy distintos orígenes, se habla de cerdos europeos como Berkshire, cerdos africanos con influencia ibérica como Colorado de Guinea, y muy posiblemente cerdos ibéricos de capa retinta.
Se introdujo en España en la década de los sesenta y últimamente se está utilizando como raza finalizadora en los cruces industriales de porcino blanco, ya que proporciona una infiltración grasa que hace que estos productos mejoren sus cualidades y sabor.
Además es la única raza cuyo cruce con Ibérico se permite dentro de la Norma de Calidad del Ibérico (R.D. 1469/2007, de 2 de noviembre), hasta en un 50% de sangre, siempre por vía paterna. De hecho, el grueso de la producción que se comercializa como de Ibérico en nuestro país procede realmente del cruce al 50% de madre ibérica con macho Duroc, aunque no se indique nada en el etiquetado, lo cual perjudica al consumidor y a los criadores de Ibérico en pureza.
Las razones de estos cruces son evidentes, se mejora enormemente la productividad, al producir lechones más fuertes y de mejor crecimiento. Pero evidentemente no es ibérico puro, como se nos quiere hacer pensar, de hecho el cruce de Ibérico con Duroc hace disminuir la infiltración grasa respecto al Ibérico.
Aunque el Duroc pueda estar muy bueno, lo puedo asegurar por experiencia propia, y nada tenga que envidiar al Ibérico, lo cierto es que la composición lipídica del Ibérico es más “cardiosaludable”. Es, sencillamente, “un olivo con patas”, según palabras de Ignacio, al que le agradezco enormemente las fotos y abundante información sobre el tema